Fantasía de un prisionero

Mi vida jugaba con la soledad de mi corazón.
Soñaba con besos sin razón.
La rutina me hizo esclavo de su pesar.
Procuraba callar para no pensar.
Tu amor eclipso mi vida.
Esa que yo daba por pérdida.
Mi cuerpo se desespera con tu partida.
Eres la dueña y ama de mis días.
La felicidad es completa cuando te tengo en mi lecho.
Las palabras resultan escasas para detallar sublime hecho.
Mis pasos volvieron por el sendero del equilibrio.
Tus caricias y abrazos logran ponerme ebrio.
La boca se me seca cuando se separan nuestros labios.
Me condenaste a vivir eternamente pendiente de tus actos.
Mi alma se perjudica sin tu presencia.
Mis ojos lloran de alegría cuando ven tu cercanía.
Todos mis versos resultan incompletos sin tu nombre.
Lograste sanar el corazón de este hombre.
Los dos parados en el altar de la iglesia adornada de flores.
Tus padres nos miran y llenan de bendiciones.
Sueño que se repite en mi cabeza sin parar.
La fantasía que lograre realizar.